🤠 El rodeo de Bullshit en Salud y Seguridad Ocupacional
En este artículo revelo las bullshits más comunes en Salud y Seguridad Ocupacional: desde TRIR maquillados hasta programas de bienestar que solo existen para la foto de Instagram. Inspirado en la frase del EHS Manager escocés Tony Colman —“Feels like I’m at the bloody rodeo, because I’m surrounded by bullshit”— este texto forma parte de mi próximo libro, disponible en primavera de 2026. Un recorrido crítico, irreverente y necesario por las contradicciones que frenan la verdadera prevención.
Dr. Christian Quiñones
8/21/2025
Inspirado en la frase de Tony Colman, un EHS Manager escocés que decía: “Feels like I’m at the bloody rodeo, because I’m surrounded by bullshit.”, quiero compartir lo que considero el verdadero rodeo de bullshit que existe en Salud y Seguridad Ocupacional.
Mucho de lo que se presume como prevención y bienestar no es más que fachada. Aquí los ejemplos más comunes:
🚩 Los Bullshits más comunes en SSO
1. “Un TRIR bajo significa que estamos haciendo un buen trabajo.”
Un TRIR bonito no es seguridad, es maquillaje. Los indicadores reactivos sirven para presumir en presentaciones, pero no previenen nada. Lo que vale son los indicadores activos: observaciones, ergonomía, inspecciones efectivas, participación de la gente. Mientras tanto, muchos accidentes se esconden u omiten para no ensuciar la estadística.
2. “El servicio médico es bienestar.”
En realidad muchas veces es el IMSS pirata o la farmacia del Dr. Simi con uniforme de la empresa. Consulta tras consulta de pastillas y justificantes que solo fabrican presentismo.
3. “El Wellbeing y la salud mental están cubiertos porque subimos fotos los viernes.”
Foto con yoga, fruta y slogans bonitos, pero si preguntas por Macroergonomía o indicadores de carga de trabajo… silencio total.
Al final, solo es un filtro de Instagram disfrazado de estrategia.
4. “No contratamos diabéticos, hipertensos o personas con obesidad…”
El colmo de la hipocresía: discriminan en la entrada, pero adentro sirven menús llenos de grasas y carbohidratos. Cambiar el pan por fruta es impensable porque “la gente se enoja”. Salud corporativa estilo: hazte bolas.
5. “Quiero platillos en el comedor de lujo, pero pago 20 pesos por cada uno.”
Exigen calidad gourmet, pero el presupuesto no alcanza ni para unas papas fritas. Resultado: un comedor que parece castigo más que beneficio.
6. “El supervisor de EHS es un policía que da rondines.”
Creen que seguridad es andar cazando culpables en rondines, como si fuera patrulla. Técnica tan “moderna” como usar una taza de baño con un rollo de papel. Esto no es cultura preventiva, es cultura del miedo.
7. “Con carpetas bonitas cumplimos la ISO.”
Archivos con separadores de colores y loguitos que solo sirven para el show. En el piso de producción, los riesgos siguen ahí.
8. “La seguridad es sentido común.”
El clásico para culpar al trabajador. Como si el “sentido común” viniera incluido en la nómina.
9. “Solo necesitamos más capacitación.”
Cursos de PowerPoint que no cambian procesos. Seguridad no se enseña en diapositivas, se construye con rediseño y controles.
10. “Con un check list diario ya estamos cubiertos.”
El check list no reemplaza un análisis profundo. Es como creer que la selfie en el gym ya te puso en forma.
11. “El trabajador siempre tiene la culpa.”
Bajo esta lógica, todo es “acto inseguro”. Nunca se revisa el error humano ni se colocan barreras para evitar que se repita. Es la excusa perfecta para no rediseñar procesos.
12. “Ya cumplimos con la NOM, así que estamos bien.”
Cumplir NOM es solo el piso. Conformarse ahí es como presumir un 6 en el examen.
13. “El EPP resuelve todo.”
El chaleco no es capa de superhéroe. Si no atacas la fuente del riesgo, es disfraz.
14. “Un simulacro al año es suficiente.”
Las emergencias no esperan calendario. Ese simulacro anual sirve solo para la foto.
15. “Con más letreros y posters la gente va a cambiar.”
El póster motiva un rato, luego se vuelve parte del paisaje.
16. “Investigaciones de accidente incompletas.”
Se hacen a medias: sin evidencias, sin testigos, sin revisión de documentos. Y terminan en conclusiones ridículas como: “El trabajador ya tenía antecedentes de una lesión deportiva y además hace tamales el Día de la Candelaria, por lo tanto no hay relación con el trabajo.”
🎯 Reflexión final
El verdadero problema no es la falta de conocimiento, sino la obsesión por verse bien en lugar de hacerlo bien.
Si queremos que la salud y seguridad ocupacional dejen de ser un rodeo de bullshit, tenemos que dejar atrás las apariencias y enfocarnos en lo que realmente importa: cultura, prevención y bienestar auténtico.
✍️ Este texto forma parte de mi próximo libro sobre Salud y Seguridad Ocupacional, que estará disponible en primavera de 2026.
